Las alternativas que contamos para abordar los conflictos en lo cotidiano se pueden agrupar en cinco. Cada una de ellas son conductas estratégicas o bien estilos personales para trabajar el conflicto, dependiendo de si una conducta pensada para la situación o bien una conducta habitual frente a todas las situaciones en general:
Evitación del conflicto: se prefiere por algún motivo
cambiar de tema y no abordarlo, evitando cualquier peligro o incomodidad.
Oculta todas sus necesidades, percepciones y sentimiento. Mira hacia otro
lado. Es mejor evitarlo ya que este problema no tiene remedio. La conducta
de evitar puede ser una estrategia para posponer el abordaje del conflicto
a la espera de un momento oportuno. Como animal se lo puede caracterizar
como avestruz. Ej. cuando evitamos encontrarnos con una persona para así
no tener que hablar de una situación entre ambos; el niño que es
continuamente molestado por sus compañeros y nunca se queja o dice nada al
respeto, aguantárselas. La mujer golpeada que niega los problemas que
existen en la pareja. Negar. “¡Que lindo día, ¿verdad? lastima que no
pueda hacer nada”
Acomodamiento: implica ceder ante los puntos de vista de la
otra persona, poniendo atención a sus preocupaciones descuidando las
propias. Se utiliza con el fin de no poner en riesgo la relación, solo se
satisface los intereses de la otra parte, quedando con un sentimiento de
insatisfacción. Animal que lo caracteriza: la oveja. Ej. cuando alguien
nos quita el turno sin respetar el orden de llegada y nos quedamos callados
para no generar problemas; cuando el amigo decide, sin consultarnos, la
película que iremos a ver. Ceder. “¡Quereme! Estoy de acuerdo con todo
lo que vos decidas”
Compromiso: implica encontrar un punto medio en el cual ambas
partes ganan algo y pierden algo. La solución satisface parcialmente a
ambas partes. Todo es negociable para terminar con el conflicto. Cada parte
gana o pierde algo, animal que lo caracteriza: el zorro. Ej. cuando al
decidir junto con los compañeros la fiesta que irán el sábado, deciden
ir a un local que a algunos no les gusta, a condición que los que lo
propusieron paguen el remis. Pactar “Vamos a hacer un trato! Tengo una
oferta que no podrás rechazar”
Competencia: cuando se quiere lograr el propio objetivo,
satisfacer los propios intereses a costa del otro sin importar la
relación. Uno gana y el otro pierde, animal que lo caracteriza: tiburón.
Ej. cuando juegan un partido de futbol entre dos escuelas; cuando el amigo
decide sobre la película que irán a ver juntos. Imponer ¡Tenés que
estar de acuerdo! ¡lo hacemos como yo quiera o nada!
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